Duelo Infantil Aletea Contigo

Duelo Infantil Aletea Contigo
Autor: Aletea Psicología Categoría: Duelo Infantil 3 May 2020

Son días como venimos diciendo, especialmente difíciles para todas y todos.

Vivir una pandemia, un estado de alarma y un confinamiento tan largo está desbordando nuestro manejo emocional, a la par que mostrando ciertas fortalezas que quizá desconocíamos tener.

Las situaciones personales, laborales y familiares de cada persona son distintas y también las estrategias de afrontamiento que podemos poner en práctica, tanto de forma individual como colectiva.

Pero sin duda, uno de los escenarios más duros que abordamos en estos días es el de la pérdida de un ser querido. Una pérdida que se suma al shock emocional del propio escenario que vivimos, a la distancia e imposibilidad de llevar a cabo los ritos culturales que estamos acostumbrados a que nos alivien, y por tanto, a la dificultad para despedirse y poder avanzar, o siquiera iniciar, un proceso de duelo.

Si esto es así entre adultos, durante la infancia, encajar la pérdida, la muerte, el miedo a perder la salud, se convierten en un auténtica maraña emocional que debemos ayudar a desenredar a las personitas más pequeñas que tenemos cerca.

Por eso queremos dejaros algunas claves para que tengáis en cuenta a la hora de abordar un proceso de duelo con los niños y niñas.

En primer lugar es muy importante que podamos hacerles partícipes de la situación que se está viviendo, de forma adaptada a su edad y capacidad. Esto es no ocultar lo que sucede, cuidar que las conversaciones al respecto que puedan escuchar sean adecuadas, y asegurarse de que comprendan en su nivel lo que ocurre.

Naturalizar las emociones y ser ejemplo. Acoger sus emociones y animar a que se expresen. Hacer lo propio nosotr@s mism@s para que entiendan lo positivo de expresar y buscar apoyo.

De esta manera, nos permitiremos llorar en su presencia, por ejemplo, aunque de forma regulada, sin desbordarnos, y mostrándoles cómo poder recuperar la calma después, a través de la respiración u otra estrategia que nos ayude.

En este punto es importante recalcar que se debe dejar espacio para que se expresen todas las emociones asociadas, no solo tristeza o miedo, también rabia, enfado, o cualquier otra que les pudiese avergonzar. Para ello, debemos tener previamente manejada la capacidad de aceptación de nuestras emociones, y de autorregulación.

Nos parece fundamental también atender todas aquellas preguntas que nos formulen y animarles a que hagan más… todo aquello que callen puede quedárseles encallado como un nudo emocional que guardar en su mochila durante largo tiempo.

También suele ser de ayuda, ofrecerles una nueva manera de existencia de la persona fallecida. Es una cuestión muy personal en cuanto a creencias y valores, pero sean las que fueren, dar la oportunidad de poder seguir sintiendo o comunicándose de alguna manera con la persona que han perdido, puede ser de gran alivio.

Asimismo, darles un soporte específico para poder despedirse, como un dibujo o una carta puede ser también de gran ayuda.

Sabemos que son momentos difíciles y ninguna de estas estrategias pueden eliminar el dolor que la pérdida nos genera, pero tenerlo en cuenta puede ayudar a que se elabore de forma más sana, y también a establecer una dinámica y vínculo familiar más positivo.

No son estrategias sencillas, y menos aún al estar viviendo el duelo también en primera persona, por ello no dudéis en apoyaros en expertos que os orienten, entrenen y acompañen tanto a personas adultas como a niñas y niños.

Una inversión en salud a tiempo puede ayudar enormemente a una estabilidad emocional en el futuro.

Aletea contigo, cuenta con nosotras.

#AleteaContigo

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